Si bien el agua limpia y segura es una necesidad para el consumo, la preparación de alimentos y el saneamiento, los expertos estiman que aproximadamente mil millones de personas en todo el mundo no tienen acceso confiable a ella. Para quienes vivimos en países con sistemas de tratamiento de aguas eficientes no tenemos que preocuparnos por el agua limpia, puede ser fácil darlo por sentado y, como resultado, desperdiciarlo.
Pero ser consciente del uso del agua es importante para todos.
La demanda de agua la ha convertido en uno de los recursos de mayor riesgo en nuestro planeta, mientras sigue siendo uno de los recursos más importantes para un futuro más sostenible. Al prestar atención a un uso más eficiente del agua, los consumidores, dueños de negocios y municipios pueden ayudar a reducir el desperdicio y conservar este preciado recurso.
Una oportunidad para preservar el agua que tenemos radica en reciclar y reutilizar el agua que ya hemos usado. Conocidas como aguas grises, esto incluye el agua que se usa para lavar la ropa, ducharse, lavar los platos y otras actividades del hogar. Las aguas grises se pueden tratar de varias maneras. Los dispositivos de tratamiento básicos llevan las aguas grises de fuentes originales como fregaderos y lavadoras y las envían a depósitos para su reutilización en riego o inodoros, donde el agua potable no es necesaria. Para reutilizar las aguas de estos dispositivos básicos deberíamos utilizar detergentes biodegradables, amigables con el medio ambiente que no dañen nuestras plantas.
Los sistemas de tratamiento de aguas grises con tecnología avanzada ayudan a optimizar el uso del agua tratándola para diversos grados de usabilidad. El agua es recolectada, filtrada y tratada usando químicos o microorganismos naturales, y luego regresa al sistema para ser utilizada para varios propósitos, dependiendo de su nivel de tratamiento. El agua tratada puede ser utilizada para el riego de plantas en residencias particulares, parques, campos deportivos y campos de golf hasta campos agrícolas. Este proceso no solo reduce la necesidad de agua dulce, sino que también reduce la cantidad de aguas residuales en nuestros sistemas de alcantarillado, los cuales son beneficios sostenibles.
Ahorrar agua reduce los costos operativos, no solo por la factura de agua más baja; también puede ahorrar energía y garantizar una fuente constante de agua en caso de sequía. Hacer un mejor uso de nuestros recursos hídricos a través de esta tecnología es una forma prometedora de mejorar las operaciones comerciales mientras se avanza hacia un futuro más sostenible.
En Rumbos Ingeniería y Servicios trabajamos con soluciones BioMicrobics que permiten la reutilización de aguas negras y grises para una gran variedad de usos no potables tanto en residencias particulares, instalaciones comerciales o industriales.
Te invitamos a contactarnos para informarte sobre todas las alternativas de tratamiento de aguas que tenemos disponibles.
Este artículo está basado en el publicado por BioMicrobics en la revista Media Planet